Capítulo 2.

-Alex, despierta, ya hemos llegado-noté que me zarandeaban levemente. Abrí los ojos y ví a Hannah.
-¿Tanto he dormido?-dije fijándome en que el avión ya estaba medio vacío.
-Sip. No te querías despertar-se rió y yo negué con la cabeza. Cogimos nuestras cosas y salimos del avión.
-Bueno, compañera de piso, te echaré de menos-dije dramática mientras la abrazaba.
-Idiota, nos veremos mañana seguramente, tenemos que conocer a esos buenorros-dijo Hann riéndose. La imité y nos despedimos. Me paré intentando buscar con la vista a mi padre.
-¡Alex!-dijo una voz masculina. Me giré y era él, con una señora a su lado, ''Anne'' pensé.
-¡Papá!-me abrazó después de una típica charla de ''cuanto has cambiado blablabla'' de padres.
-Alex, te presento a Anne-dijo apartándose para que pudiera verla.
-Hola-dije sonriente.
-Hola, encantada de conocerte-dijo ella con una sonrisa también.
-Tiene un hijo de tu edad, vive con nosotros, pero no ha podido venir por lo que se pueda liar...-dijo mi padre. Asentí confusa. ¿Liar? ¿Qué? No quise ser cotilla y no pregunté, fuera había un taxi esperándonos, metimos mis maletas en el maletero y me senté en la parte trasera con Anne. Me iban preguntando sobre como me iba y todo eso, llegamos a la casa, enorme se quedaba corto.
-Wow-dije cuando  bajamos del coche. Anne rió y me ayudó con las maletas.
-Le dije a Harry que saliera a ayudar...-dijo renegando mientras caminábamos hacia la puerta. ''Harry, que nombre tan original'' pensé, claro, era ironía, era un nombre muy común en los ingleses. Anne abrió la puerta y pegó un grito llamando al tal Harry.
-¡Ya voy!-dijo alguien desde arriba. Mi padre terminó de entrar las cosas y cerró la puerta, el salón era enorme y precioso, con un toque muy moderno y eso que la casa por fuera parecía de las típicas inglesas más antiguas. Me volví para sacar mi bolso de una de las maletas, donde llevaba el móvil.
-Te dije que bajaras a ayudarla-oí que decía Anne.
-Lo sé, lo siento, estaba hablando con Louis-me quedé de piedra. No podía ser. Me giré lentamente. Y...¿sorpresa? el bolso cayó al suelo.
-Sísísí, soy Harry Styles-dijo con aire chulo. Arqueé las cejas mientras lo miraba incrédula.
-¿Harry?-dije mirándolo. Si que había cambiado...dios mío. Me miró durante unos segundos.
-¿A-alex?-dijo tras dejar de hacerme el escaner.
-¿Os conocéis?-preguntó mi padre sorprendido.
-Sí, nos conocimos en Marbella, hace tres años-contestó Harry. Yo aún estaba enfadada con él, el día que nos conocimos nos dimos nuestros teléfonos y quedamos para el día siguiente, no sé como ocurrió que nos acabamos besando y no me volvío a llamar.
-Sí, en Marbella, hace tres años-repetí mirándolo. Él me sonrió. Joder que bueno estaba. ''Céntrate Alex, es tu hermanastro'' me repetí a mí misma un par de veces.
-Bueno pues entonces me ahorro las presentaciones-dijo Anne riendo.-anda Harold, ayúdala a subir las maletas.
-Claro-dijo Harry sonriéndome. Evité su sonrisa prepotente y cogí todo cuanto pude, él iba delante de mí para guiarme hasta mi habitación.-Señorita-dijo mientras habría la puerta y me dejaba pasar. Reí irónicamente.
-Menudos modales Styles-dije dejando las cosas en el suelo y abriendo la maleta dispuesta a deshacerla.
-¿Verdad? Soy todo un caballero-rió mientras se sentaba en la silla que había en el escritorio.
-Cuanta confianza, ¿no? -dije mirándolo. Él volvío a sonreír. Ag. ¿No se cansaba de estar con la sonrisita todo el rato?
-Venga, nos conocemos desde hace tres años.
-Un día-contesté rápida.-solo nos vimos un día.
-Y medio-dijo riendo. A mí ya me estaba poniendo nerviosa con tanta felicidad. Cogí una camiseta y la colgué suspirando.-¿Te ayudo?-dijo levantándose. Me volví.
-Déjalo ya, ¿quieres? Sigue tu vida, yo seguiré la mía. Somos hermanastros de ahora en adelante, olvídame-dije cogiendo otra camiseta y pudiendo notar su asombrada expresión.
-¿Se puede saber qué te hice?-me giré de nuevo.
-¿Qué me hiciste?-repetí su pregunta. Harry asintió.-Si besas a alguien al día siguiente de conocerla, que menos que llamarla para aclararlo-dije volviéndome de nuevo al gigantesco armario.
-¿Estás enfadada por eso?-dijo con el tono más normal del mundo.-Venga ya Alex, fue hace tres años-dijo cansado.
-Déjalo Styles-le dije mientras seguía a lo mío.
-Vamos Alex-se quejó.-Es una tontería-volvió a quejarse.
-Puede que lo fuese para ti-me giré.-pero te digo que no fue la primera vez que me hicieron algo parecido-y me volví a girar, joder, me iba a marear de tanto girarme y girarme.
-¿Qué te pasó?-me giré sorprendida.-vale, vale, no es de mi incumbencia-dijo con las manos en alto.-lo siento, ¿empezamos de cero?-preguntó. Suspiré pesadamente.
-Está bien-Harry sonrió y se acercó.
-Soy Harry-me dio la mano.
-Alex-me sonrió.
-Ahora sí, ¿puedo ayudarte?
-No, largo-él se rió.
-Venga, yo ordeno la ropa interior-dijo riéndose. Me volví a girar por enésima vez en la tarde.
-¡Largo!-le grité y se fue riéndose. Que pesadilla de chico. Y lo que me esperaba...
Estuve como dos horas arreglando mis cosas e instalándome, cuando decidí salir a por algo de comer, ya que no había comido nada desde que llegué. Pero no encontraba ni a mi padre ni a Anne, así que bajé al salón encontrándome con Harry y una chica rubia en el sofá.
-Emm-Harry se giró.
-Alex, esta es Sasha, mi novia-¿ah? Ni que me importara.
-Encantada-dijo ella con una sonrisa. Un momento. Yo la conocía.
-¿Alison?-dije sorprendida. Ella se empezó a reír.
-La misma-me sonrió. Era Sasha Pieterse, Alison en Pretty Little Liars. Mi cara debió ser un poema en esos instantes.
-Encantada de conocerte-dije intentando sonar amable. Me giré hacia Harry.
-¿Y mi padre?
-Ha salido con mi madre por algo del trabajo. ¿Querías algo?-¿hola? ¿qué coño le pasaba? No parecía el Harry de hace unas horas.
-Nada-contesté seca.-avisarle de que iba a salir-mentí y cogí mi bolso que se había quedado en el mueble de la entrada para salir dando un leve portazo. No tenía derecho a hacerse el chulo delante de su puta novia. Llamé a Hann.
-¿Qué pasa maripooooosa?-dijo su dulce voz a través de la otra línea.
-Vas a flipar.
-¿Qué es?
-Te espero en el Starbucks de Oxford Street.
-¿Cuál de ellos?-rió.
-Mmm pues el que hay cercano a H&M.
-Vale, ya voy para allá-colgó y mientras yo pedí un taxi, porque conociéndome me iba a perder andando por aquí. Llegué al Starbucks y entré buscando una mesa alejada del barullo para hablar tranquilamente. Pasados diez minutos, Hannah apareció por la puerta sonriente.
-Va venga, cuéntame tus penas-dijo ella graciosa como siempre. Le pegué un manotazo.
-Harry Styles-dije bebiendo de mi café.
-¿Qué pasa con ese?-dijo ella mientras mientras cogía el suyo.
-Es mi hermanastro-Hann expulsó todo lo que había bebido.
-No jodas-dijo limpiando la mesa ante mi mirada cabreada.
-Sí jodo-dije bufando.
-¿Y qué ha pasado?-le conté el primer encuentro y el último. Hannah estaba más cabreada que yo.-¿¡Pero cómo se atreve?! ¿¡Después de lo que te hizo?! ¿¡Y la guarra esa?!
-Oye, oye, oye, tranquilizate tía.
-No, no, no. Vamos a tu casa. Ya-se levantó dispuesta a ir pero la paré a tiempo.
-Déjalo. Me da igual, simplemente tendré que aguantarlo en las comidas y con suerte en poca cosa más-dije tranquila mientras ella ya más calmada se volvió a sentar. Hannah iba a protestar como siempre, cuando le interrumpió el sonido de mi teléfono. Me quedé parada unos instantes dudando en contestar o no.
-¿Quién es?-dijo ella inclinándose para mirar la pantalla.
-Es Harry-dije casi en un susurro. Lo cogí.
-¿Qué quieres?-dije en el mismo tono que me lo había dicho él antes.
-¿Dónde estás?-ignoró mi pregunta borde por completo.
-Por ahí.
-Alex.
-¿Qué?
-¡Que me digas donde estás!
-¿Y a ti que te importa? Eres mi hermanastro, y solo nos conocemos de hoy, no mandas sobre mí.
-¡Alex, joder!
-Volveré dentro de un rato. Adiós.
-¡No cuel...-tarde. Colgué. ¿Pero qué coño estaba pasando? Bufé cansada.
-¿Y ahora qué pasa?-preguntó Hannah.
-Harry preguntando que donde estaba, estaba cabreado y me estaba poniendo nerviosa.
-Será mejor que vuelvas.
-Sí, pero voy a volver porque tengo que terminar de ordenar mis cosas, no porque el rizos me lo haya mandado-dije levantándome mientras cogía mi bolso y Hann reía.
-Te paso mañana a recoger para ir a la discográfica.
-Claro. Hasta mañana-me abrazó y cada una se fue por su camino.
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En este capítulo es notable mi obsesión por PLL(? JAJAJAay que pena. Bueno en fin, mil gracias a todas y cada una de vosotras que leéis esta novela, de verdad, love youuuuuu<3.